El submarino es uno de los tipos de tortura más crueles e insoportables. Durante la tortura, se coloca a una persona relacionada sobre su espalda, inclinando la cabeza, y luego se vierte agua en las aberturas nasales y orales. Debido a la asfixia del torturado, se crea una ilusión de que se está ahogando.
Atención, no se recomienda leer a personas impresionables con una mentalidad débil.
Cuando el público se dio cuenta del uso del submarino por parte de la inteligencia estadounidense durante el reinado de Bush el Joven, conmocionó a todo el mundo y causó una gran protesta pública. La administración aplicó este tipo de tortura no solo a terroristas, sino también a ciudadanos estadounidenses sospechosos de cometer delitos. La tortura con agua también se utilizó para reunir información sobre planes de guerra en Afganistán e Irak. El humanista secular y escritor Christopher Hitchens se ofreció como voluntario para el submarino en 2008. Dejó el experimento en estado de shock y miedo a lo que la gente puede hacer entre sí. Después de eso, Hitchens dijo: "Si el submarino no es una tortura, entonces la tortura no existe en absoluto en el mundo".
Por supuesto, cada uno de nosotros experimentó estos terribles sentimientos de asfixia cuando estuvimos bajo el agua durante demasiado tiempo. La falta de oxígeno en los pulmones provoca temblores en las extremidades y se producen ataques de ansiedad en la cabeza. Luego, todo el cuerpo comienza a temblar, y después de que el cuerpo usa todo el oxígeno, comienza un verdadero pánico. Al final, solo sientes una cosa: el agua que inunda la laringe. Estos son los sentimientos experimentados por las personas que fueron torturadas por el agua, y esto realmente da miedo. TheBiggest.ru decidió echar un vistazo más de cerca a esta aterradora e inhumana medida de impacto en las personas, que se utiliza en el mundo moderno. En este artículo, aprenderá 10 datos sobre el submarino: ¡una simulación de pesadilla de ahogamiento humano!
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Tortura de agua
El submarino tiene una rica historia que comenzó con el concepto más amplio de tortura de agua. La tortura líquida se usó tanto en la antigüedad como en períodos posteriores de la historia. La forma más fácil era dejar a la víctima bajo un chorro de agua goteando en un lugar durante mucho tiempo. Muchos fueron sometidos a diversas formas de ahogamiento forzoso, o las víctimas fueron dejadas a nadar, esperando hasta que se agotaron y se sumergieron. Por supuesto, vimos repetidamente películas sobre la mafia, donde la víctima fue tomada por el cabello, hundiendo la cabeza en el inodoro, el barril, el lavabo o la bañera, lo que lo hizo ahogarse. En el último momento, el "cliente" fue sacado del agua, exigiendo la información necesaria, si el torturador no recibió una respuesta, repitió el proceso una y otra vez.
A pesar de que estos métodos se consideran "parientes" distantes del submarino, si hablamos de ello como un proceso de forzar el agua hacia la boca y la abertura nasal, también pueden atribuirse a este tipo de tortura. Pero, no hay duda de que el método moderno es mucho peor, ya que el agua llena constantemente la cabeza, la boca y la nariz, creando una sensación continua de ahogamiento. El submarino, tal como lo conocemos, se aplicó por primera vez en el siglo XIV.
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Inquisición española
¿Dónde más podría intentar buscar los primeros casos de tortura con plomo en el agua, si no a la Inquisición española? Sin embargo, lo mismo se aplica a otros tipos de tortura. Hay muchas fuentes de literatura que mencionan la tortura por agua realizada por inquisidores españoles en conjunto con instalaciones bien pensadas y bien diseñadas para la tortura.
Los españoles ataron al torturado a una construcción astuta, buscando su reconocimiento. Ataron un trozo de tela sobre la boca de la víctima y luego la regaron con agua. Al filtrarse a través del material, el agua cayó en la boca del prisionero, creando el efecto de ahogamiento. La jarra de la que se vertió el agua fue hecha especialmente para la tortura. Tenía una forma tal que cuando la víctima escupió agua e intentó inhalar, las paredes del recipiente no permitieron que el líquido salpicara, dirigiendo inmediatamente el agua de regreso al tejido. En 1800, este tipo de tortura se consideraba innecesariamente cruel e inapropiado para su uso por parte de la iglesia, el gobierno o el ejército debido a su naturaleza desagradable y aterradora.
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Filipinas
Los filipinos aprendieron sobre el submarino gracias a sus conquistadores: la nación isleña fue durante muchos años una colonia de España, después de lo cual pasó a manos de los Estados Unidos. Fue aquí donde los estadounidenses comenzaron a usar la tortura de agua (sin contar los casos de submarinismo en las cárceles) en 1902 durante la guerra entre Filipinas y Estados Unidos. Esto se hizo público gracias a la revista Life, que publicó imágenes de la tortura sufrida por los soldados filipinos.
Incluso en ese momento, la tortura parecía tan aterradora que causó conmoción y condena del público. Theodore Roosevelt, quien se desempeñó como presidente de los Estados Unidos, envió un telegrama dirigido al comandante del ejército estadounidense, instándolo a que dejara de usar el submarino, calificándolo de represalia inusualmente brutal. El teniente Grover Clint señaló en sus notas que durante la tortura con agua, la víctima sufre sin lugar a dudas. Se siente como una persona infinitamente ahogada.
Es terrible imaginar los sentimientos de un hombre que parece haberse ahogado, pero que aún no puede hacerlo. Está atrapado en este purgatorio durante varios minutos o incluso horas. ¡Se informa que un hombre en Arabia Saudita fue torturado con el submarino durante más de dos horas y media!
Por cierto, Estados Unidos y Filipinas ahora están incluidos en la lista de los estados más grandes del planeta.
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Vietnam
Filipinas no se convirtió en el último lugar en Asia donde se usó la tortura de agua durante la guerra, y tampoco se convirtió en el último lugar donde lo hizo el Ejército de EE. UU. La guerra de Vietnam se llevó muchas vidas, trayendo derramamiento de sangre y ruina. Pero también se dio a conocer gracias al uso de la tortura de agua, con la ayuda de la cual recibieron la información necesaria de los prisioneros. En la portada del Washington Post del 21 de enero de 1968, se imprimió una imagen con el título: "La tortura de agua con imitación de ahogamiento está diseñada para hacer que la víctima hable". La fotografía representaba al ejército estadounidense vertiendo agua sobre la cara de un soldado vietnamita.
El soldado estadounidense representado en la fotografía fue sometido a juicio. La cruel tortura golpeó a tanta gente que miles de personas que se manifestaron contra el uso del napalm exigieron de la misma manera torturar al militar culpable.
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Como sucedió esto
El procedimiento estándar para la tortura con agua es el siguiente: se coloca a una persona en una mesa ajustable, donde la línea de la cabeza está 15-20 grados debajo de la línea de las piernas. Esto es necesario para que el agua se drene en la cara. La víctima está atada con correas o es sostenida por varios asistentes. Como en los días de la Inquisición española, se coloca un trapo en la cara del "prisionero" para que el agua se absorba y permanezca en la cara.
Después de esto, el líquido se vierte en un trapo o inmediatamente en el área de la garganta y la nariz, lo que acelera el proceso. La víctima pierde oxígeno, se siente ahogada e intenta liberarse o escupir agua. El tejido en la cara actúa como una especie de válvula unidireccional. Le permite exhalar, pero no le da acceso al oxígeno para inspirarse.
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¿Qué siente la víctima?
Cuando una persona se ahoga, permanece consciente hasta el final y lo pierde solo con una falta crítica de oxígeno. Después de perder el conocimiento, deja de pelear y a menudo respira agua.
En el caso de la tortura de agua, la víctima puede perder el conocimiento varias veces por ciclo. Casi todos los casos de submarino conducen a la pérdida de la conciencia. Después de que el agua deja de verter, una persona recupera sus sentidos para ... la tortura continuó, y la imitación del ahogamiento comenzó con renovado vigor. Solo imagina cómo se siente una persona en ese momento.
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Como se ve
Ramón Navarro fue víctima de un criminal japonés, Chinsaku Yucca, quien lo torturó con "tortura de agua". En audiencias judiciales en 1947, Ramón describió sus sentimientos en el proceso de tortura. Afirmó que esto no es doloroso, sin embargo, una persona pierde la conciencia y el control, como durante el ahogamiento.
A veces, los "violadores" intentan aumentar la conmoción de la víctima utilizando agua helada para proporcionar un contraste cuando entra líquido. Y apretar los brazos y las piernas con correas en la mesa proporciona una sensación de desesperanza, ya que la víctima no puede luchar. Sin embargo, intentan escapar, forzando cada músculo e infligiéndose muchas lesiones. Es por eso que muchas víctimas describen el submarino, no solo como un procedimiento terrible, sino también doloroso.
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Daño a los órganos internos.
Además de las lesiones externas que la víctima recibe en un estado encuadernado, también corre el riesgo de sufrir daño cerebral debido a una grave falta de oxígeno y daño pulmonar. De hecho, el agua no debería entrar en los pulmones, pero según algunas personas, esto les sucedió. Una persona informó que fue torturado con agua sin usar una toalla, simplemente le echaron agua por la nariz y le taparon la boca con las manos. No podía respirar, resistiendo el fluido, y penetraba en los pulmones. Según él, este método de tortura es aún peor que el submarino tradicional.
En algunos casos, se puede verter agua en el estómago, lo que causa un dolor terrible. Chinsaku Yucca se sentó sobre el estómago de Navarro para que el agua saliera por la boca y las fosas nasales, después de lo cual volvió a verterlo. Si continúa este proceso durante demasiado tiempo, la víctima puede morir, incluso sin humedad en los pulmones.
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Ley
Los Convenios de Ginebra fueron firmados por varios países para proteger tanto a los civiles como a los militares de los horrores de la guerra. Estas convenciones prohíben las muchas torturas y cosas terribles practicadas por los militantes antes de su conclusión. Gracias a los acuerdos, apareció algo como el "crimen de guerra". De conformidad con la Convención de Ginebra de 1929, y más tarde en la nueva Convención de 1949, el submarino estaba prohibido. Aquellos que usan este tipo de tortura recibieron el estatus de criminales de guerra.
La historia de la tortura de agua ha experimentado altibajos. A menudo, al hacerse público, el submarino provocó indignación y censura, afirmando el estado de uno de los métodos de tortura más terribles, que las personas simplemente no pueden usar.
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Casos ilegales de tortura por agua
A pesar de la prohibición, algunas personas que se sienten por encima de la ley están utilizando la tortura del agua con fuerza y fuerza incluso en nuestro tiempo. Hay casos en que el submarino "ayudó" al ejército y la policía a obtener reconocimiento. Entonces, en agosto de 2018, dos cadetes de la Real Policía Militar de Gran Bretaña torturaron a un hombre.
El actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha propuesto devolver la práctica de la tortura para combatir el terrorismo, en particular, hablando sobre el submarino. Y esto, a pesar del escándalo que rodea a la administración Bush, que no rehuyó la tortura con agua, tanto en el país como en el extranjero.
En resumen, vale la pena señalar que, a pesar de los muchos logros en ciencia, literatura y otras industrias, algunas personas hacen cosas tan terribles (el submarino es una de ellas) que les hace dudar de su desarrollo y civilización.
Autor del artículo: gunner1886